Es de sobra conocido que es muy difícil aprenderse el trazado del circuito. Tanto es así, que pilotos profesionales han podido comprobarlo por sí mismos.
Y con esto no me refiero a los accidentes que se poducen, sino a una curiosa anécdota ocurrida durante una carrera de Formula 3 durante los años 70s, donde el famoso Nelson Piquet perdió el control de su vehículo girando sobre sí mismo, eso sí, por suerte sin percance alguno. Al finalizar el "trompo" no sabía hacia a donde debía ir, si hacia la derecha o a la izquierda, todo le parecía igual. Así que para asegurarse, tuvo que esperar a que pasase el siguiente piloto y así pudo proseguir con la carrera.
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